Tener un sueño saludable durante el embarazo es bueno para la madre (y el bebé)

Mujer embarazada durmiendo en una cama.

Dormir bien durante el embarazo es fundamental. Sin embargo, al igual que muchas mujeres, es posible que tenga dificultades para dormir lo suficiente.

Además de adaptarse a los cambios físicos y mentales, puede que las mujeres embarazadas también deban enfrentar nuevos problemas para dormir cada trimestre. Un sueño interrumpido o inadecuado puede complicar el parto y afectar la salud de la madre y su bebé por nacer.

Los estudios indican que el sueño excesivo o insuficiente también está relacionado con enfermedades cardíacas. Es por eso que la American Heart Association recomienda que los adultos tengan como objetivo dormir entre 7 y 9 horas en promedio cada noche para favorecer la curación, mejorar la función cerebral y reducir el riesgo de sufrir enfermedades crónicas.

No hay una recomendación específica relativa a las horas de sueño para las mujeres embarazadas, ya que cada mujer es única, así como cada embarazo. Por lo tanto, asegúrese de hablar sobre sus inquietudes o problemas de sueño relacionados con el embarazo con un profesional de la salud, quien puede elaborar un plan de tratamiento personalizado y detectar trastornos del sueño para descartar otras afecciones más graves.

Problemas de sueño durante el embarazo

Es posible que las mujeres embarazadas deban lidiar con un sueño inadecuado y varios factores que interrumpen el sueño, incluidos los que se indican a continuación:

  • Ansiedad y preocupación
  • Dolor o molestias, como dolor de espalda o sentir que el bebé se mueve
  • Indigestión, acidez estomacal o náuseas
  • Calambres en las piernas y síndrome de las piernas inquietas (necesidad incómoda de mover las piernas)
  • Posiciones para dormir incómodas o limitadas
  • Micción frecuente

Maneras de mejorar el sueño durante el embarazo

Antes de acostarse, aplique algunas recomendaciones fundamentales sobre el sueño para tener un merecido descanso (junto con su bebé).

  • En primer lugar, tenga en cuenta que lo que funciona una semana podría no funcionar la próxima; todo depende de cómo cambie y crezca su cuerpo durante el embarazo.
  • Una forma de descubrir una posición cómoda para dormir es usar almohadas entre las rodillas y bajo el vientre para apoyar el cuerpo. También intente acostarse con las rodillas dobladas para no presionar la zona lumbar.
  • Normalmente, a las mujeres embarazadas se les recomienda dormir sobre el lado izquierdo del cuerpo. Sin embargo, es de esperar que se mueva durante la noche. Para el tercer trimestre, se recomienda no dormir boca arriba. Dormir con la parte superior del cuerpo levantada puede ayudar a evitar la acidez estomacal.
  • Hacer cambios en lo que come y bebe, además de cambiar los horarios en que lo hace, puede disminuir las interrupciones del sueño. Coma pequeñas comidas durante el día y deje de comer o beber líquidos algunas horas antes de ir a dormir. Evite consumir alimentos que produzcan indigestión y acidez estomacal, incluidos los cítricos y los alimentos picantes o grasos. No se acueste justo después de comer.

Otros consejos

  • Realice ejercicios prenatales seguros, como caminar a paso ligero durante el día. Incluso los ejercicios de bajo impacto, como el yoga, pueden ayudar a relajar el cuerpo y aliviar el estrés.
  • Considere mantener un horario de sueño constante en la mayor medida posible. Esto significa acostarse y despertarse a la misma hora todos los días. Sin embargo, puede que las mujeres embarazadas necesiten tomar una siesta durante el día o dormir más por la noche. Eso está bien. Siga lo que su cuerpo necesite.
  • Tome en serio los problemas respiratorios. Los ronquidos y la obstrucción respiratoria aumentan durante el embarazo. Hable con un profesional de la salud acerca de los problemas respiratorios durante el sueño.
  • Lleve una rutina nocturna tranquila para controlar el estrés.
  • Limite el tiempo que pasa delante de pantallas y luces intensas antes de dormir y no deje ningún celular cerca de la cama para evitar interrupciones.
  • Mantenga la habitación oscura y a una temperatura agradable.
  • Evite tomar medicamentos o suplementos para dormir, a menos que un profesional de la salud se lo indique.