Consejos para mantenerse saludable mientras trabaja desde casa

Mujeres que trabajan desde casa en la mesa de la cocina.

Es posible que el trabajo desde casa mientras se afronta el estrés diario sea algo desalentador.

Si el estrés no se trata, puede volverse crónico y causar problemas en el bienestar físico y emocional. Con el fin de eludir la presión que produce el exceso de trabajo desde casa, algunas mujeres recurren a hábitos poco saludables, como comer en exceso, permanecer físicamente inactivas o fumar.

Sin embargo, a continuación encontrará algunas estrategias que pueden ayudarla a controlar el estrés y mantenerse saludable mientras trabaja desde casa:

  • Mantenga el hogar en casa. Trabajar desde casa no debería significar que su empresa se haya adueñado de cada metro cuadrado de su hogar. Designe una habitación o un rincón para su computadora, papeles, informes, carpetas y otros aspectos relacionadas con el trabajo. Asegúrese de separar el espacio de trabajo del resto de su casa, y deje todo allí al final del día.

    Esta medida ayuda a la vida familiar, ya que ver cómo cierra la conocida puerta que separa su oficina del resto de la casa significa que está lista para pasar tiempo con la familia sin interrupciones. Además, como separó el trabajo en un espacio exclusivo, no tendrá que enfrentarse a recordatorios visuales estresantes de las tareas sin hacer en toda la casa.
  • Siga “transportándose”. Cuando trabajaba en una oficina, llegar hasta allí le daba la oportunidad de prepararse mentalmente para su función. Asimismo, el viaje de vuelta a casa la ayudaba a relajarse antes de volver a ejercer sus funciones de madre. Aún necesita tener estos momentos de transición. Cambiar de funciones repentinamente puede provocar que se sienta ansiosa y desorientada.

    Así que tómese entre 10 y 15 minutos antes y después de su jornada laboral para “transportarse”. Ordene su escritorio, reproduzca música o un pódcast, o haga ejercicios de respiración; cualquier actividad que la ayude a prepararse para sus funciones de trabajo y la maternidad.
  • Establezca límites de horarios. El hecho de estar en casa no significa que esté en “modo mamá”. Comunique a su familia cuándo pueden permitirse pequeñas interrupciones y cuándo el trabajo exige su total concentración. Si lo hace con sus colegas, ¿por qué no hacerlo con su familia?

    Crear buenos hábitos de trabajo desde casa la ayudará a cuidar su tiempo y cumplir con ambas responsabilidades. Se sentirá más libre para realizar tareas durante el día y menos culpable cuando llegue el momento de apagar la computadora para pasar tiempo con la familia.
  • No olvide el almuerzo. Una trampa frecuente del trabajo desde casa es dejar muy poco tiempo para comer antes de la siguiente reunión o incluso saltarse el almuerzo. Tanto el cuerpo como la mente necesitan este hábito diario. Llenarse de energía con un almuerzo saludable favorece la concentración mental y la resistencia física no solo para el resto del trabajo, sino también para lo que vendrá después con la familia. Aproveche la ventaja de trabajar desde casa y prepare comidas que le gustan, las cuales no podría conseguir en la cafetería de la empresa. Es probable que incluso ahorre dinero en el proceso.
  • Salga de casa. Otra ventaja del trabajo desde casa es mantenerse a distancia de los colegas y aprovechar la tranquilidad para hacer las asignaciones con agilidad. No obstante, en ocasiones, la falta de interacción puede provocar una sensación de aislamiento. Salir de casa es especialmente importante ahora que su refugio personal alberga su oficina. Busque actividades, pasatiempos y ejercicios para realizar fuera de casa. Cuando se presente la oportunidad, reúnase en persona en lugar de hacerlo de forma remota. Caminar durante los recesos o incluso durante las llamadas también le permite salir al mundo en busca de aire fresco y sol.