Pruebas habituales para el diagnóstico de arritmia

Son diversas las pruebas que pueden ayudar a su médico a diagnosticar una arritmia y a controlar la eficacia del tratamiento.

Monitor Holter

médico colocando un monitor Holter en un paciente

Un monitor Holter (o monitor electrocardiográfico ambulatorio continuo) es un dispositivo pequeño y portátil que permite realizar electrocardiogramas (EKG o ECG).

Los monitores Holter pueden grabar 24 horas o más de señales electrocardiográficas continuas. Con él, los médicos obtienen una “película” de la actividad eléctrica del corazón, en contraposición a la visión mucho más limitada que se obtiene con un EKG.

Es probable que su médico le pida que lleve un diario de sus actividades y síntomas. Posteriormente, los resultados del monitor Holter pueden compararse con su diario para comprobar el ritmo cardíaco medido durante las actividades o la aparición de síntomas.

Obtenga más información sobre los monitores Holter.

Descargue nuestro diario para monitor Holter imprimible (PDF).

Registrador de episodios

Para estudiar posibles arritmias que se presentan con poca frecuencia o rápidamente, puede que su médico le sugiera el uso de un monitor de episodios.

Existen diversos tipos de monitores de episodios que se llevan a modo de pulsera, con clips de dedo o parches colocados bajo los brazos durante uno o dos meses. Permiten grabar y almacenar los datos sobre el sistema eléctrico del corazón. Esos datos se envían después al médico para que los analice.

Obtenga más información sobre los registradores de episodios cardíacos.

Pruebas en cinta de correr

Las pruebas de esfuerzo, algunas veces denominadas pruebas en cinta de correr, pueden ayudar a diagnosticar a pacientes cuyas presuntas arritmias están relacionadas con el ejercicio.

En las pruebas de esfuerzo, el paciente debe caminar o correr en la cinta o en una bicicleta estática mientras se monitoriza su frecuencia y ritmo cardíacos. Este esfuerzo puede provocar una arritmia, lo que permitiría al médico estudiar el latido cardíaco anormal.

Obtenga más información sobre las pruebas de esfuerzo.

Prueba en camilla basculante

Existe la posibilidad de que se realicen pruebas en camilla basculante o pruebas de basculación si el paciente ha sufrido episodios de desmayo. Permite conocer cómo reaccionan la frecuencia cardíaca y la presión arterial al cambiar de posición horizontal a vertical.

En esta prueba, puede que se introduzca un catéter en una arteria para vigilar la presión arterial desde el interior del vaso sanguíneo. También es posible que le coloquen una vía intravenosa (un pequeño tubo de plástico que se inserta en una vena) antes de la prueba.

Si se descubre la causa de los desmayos, podrían administrarle medicamentos a través de la vía intravenosa para prevenir los episodios.

Obtenga más información sobre las pruebas de basculación.

Pruebas electrofisiológicas (estudio de EF)

Las pruebas electrofisiológicas, también denominadas estudios EF, pueden revelar posibles arritmias.

Durante el procedimiento, que se realiza con anestesia local, se introducen catéteres temporales con electrodos a través de las venas periféricas (o arterias) hasta el corazón mediante el uso de un fluoroscopio. Estos catéteres con electrodos se colocan en las aurículas, en los ventrículos o en ambos. Registran las señales eléctricas del corazón y crean un “mapa” de la ruta que sigue los impulsos eléctricos en cada latido del corazón.

Esta prueba puede provocar arritmias conocidas pero poco frecuentes, lo que permite diagnosticarlas. Puede ayudar, específicamente, a desencadenar taquicardias (frecuencia cardíaca rápida) o bradicardias (frecuencia cardíaca lenta) latentes.

Obtenga más información acerca del estudio de EF.

Procedimiento electrofisiológico esofágico

En este procedimiento, se inserta un catéter fino y flexible en las fosas nasales y se coloca en el esófago (el tubo que conecta la boca con el estómago). El electrodo del catéter realiza un electrocardiograma (EKG). La aproximación del catéter al corazón permite obtener resultados más precisos que con un electrocardiograma convencional.

Este procedimiento también puede provocar arritmias imprevisibles para su diagnóstico. Pueden administrarse medicamentos durante la prueba para determinar el enfoque más eficaz.

Ecocardiografía

En el ecocardiograma, se utilizan ondas de ultrasonido para determinar el tamaño, la estructura y el movimiento del corazón. Este tipo de ecocardiografía utiliza las ondas sonoras de una forma muy parecida a como se utilizan en las ecografías para controlar el crecimiento de un bebé en el útero.

El ecocardiograma es un procedimiento indoloro que suele aportar información muy valiosa sobre las arritmias cardíacas. El tipo más común de ecocardiograma es la ecocardiografía transtorácica (ETT).

Obtenga más información sobre la ecocardiografía (PDF).